lunes, 6 de agosto de 2012

El hada de los sueños

Linda hada que estás ahí ¿Me estás escuchando?
Sabes que necesito polvo de hadas para rociar mi ventana
en la noche, para que las pesadillas y los monstruos no puedan
entrar.
Pequeña hada, ¿estás ahí, dando tu luz y tu calor, con tu inocencia,
candidez y dulzura, protegiendo mis sueños?
¿Te encontraré algún día entre los arbustos y la hierba,
o en el cielo danzando al rededor de la luna con tu lindo vestido de flor?
Linda hada, tu que estás ahí, regalame una sonrisa de tus
alas de luz y, con la delicadeza de una mariposa, vuela hasta mi ventana
para proteger mis sueños y mis anhelos.